En una cárcel de Nueva Zelanda se produjo un incidente bastante insólito. Lo normal es que los que están dentro de un centro penitenciario intenten salir de él, legalmente o mediante una fuga. En cambio, unos ladrones neozelandeses hicieron todo lo contrario: este sábado por la noche irrumpieron en la prisión de la ciudad de New Plymouth, la más antigua del país, y cometieron un robo.
Los primeros en presentarse en el lugar del incidente fueron los bomberos: recibieron una alerta de incendio. Nada más llegar, descubrieron las cortinas del edificio administrativo en llamas y se dieron cuenta de que habían roto la ventana violentamente.
Llamaron a la policía y cuando esta llegó comprobó que se trataba de un asalto. Sin embargo, al parecer los saqueadores se quedaron con un único trofeo: un televisor de plasma de 50 pulgadas.
La policía comenta que, lo más probable, es que los ladrones se fueran a pie, por eso están preguntando a los vecinos de la zona si han visto a alguien en las cercanías de la prisión en esas horas con un televisor grande, o si han visto u oído algo sospechoso.
El complejo situado en New Plymouth empezó a funcionar como una cárcel en 1860 y hoy en día aloja a 122 presos. Las medidas de seguridad incluyen alambres de púas, alambres Concertinas, patrullas, guardias con perros, cámaras y dispositivos electrónicos de seguridad.
Fuente: minutodigital.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario